Currilla Vazquez

18 marzo 2010

Enséñame Señor


Muéstrame, oh Señor, Tus caminos.
Enséñame tus sendas.
Encamíname en tu verdad, y enséñame.
Porque tú eres el Dios de mi salvación.


Salmo 25 : 4 , 5


Necesito que me eduques Señor.
Enséñame a través de los acontecimientos, de cada día.
Tú eres quien me los pone delante, y yo quiero entenderlos.
Enséñame desde el silencio de mi corazón.
Tú estás presente, en mis cambios de ánimo.
Tú Señor conoces mis pensamientos.

Enséñame Padre, a conocerme a mí misma.
Enséñame a entender este lío de sentimientos, y este
embrollo de ideas que llevo por dentro, y

con lo que no sé qué hacer.
¿Por qué reacciono como reacciono?.
¿Por qué me siento triste de repente, y sin motivo?
¿Por qué me enfado, con los que más quiero?.
¿Por qué a veces, no puedo orar, cuando lo deseo?
¿Por qué dudo de ti, cuando proclamo mi fe en ti?
¿Por qué me odio a mí misma, cuando se que Tú me amas?
¿Por qué soy un enigma, para mí misma, que cuanto
más me examino, menos me entiendo?

¡Te necesito, con todo mi ser!
Padre bueno, por favor...
Enséñame.

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