Currilla Vazquez

16 julio 2010

Nuestros Problemas Sociales


He aquí que esta fue la maldad de
Sodoma tu hermana:
Soberbia, saciedad de pan, y
abundancia de ociosidad tuvieron
ella y sus hijos; y no fortaleció la mano
del afligido y del menesteroso.

Ezequiel 16: 49

La violencia cada vez mayor en nuestra
sociedad es alarmante.
La brutalidad que vemos hoy día va desde el
abuso a los niños, y el maltrato físico y psicológico
a los cónyuges, hasta crímenes inimaginables
y asesinatos sin sentido.
Como resultado de todo esto, nuestros políticos
y los jefes de la policía abogan por una mejor
prevención del crimen y castigos más severos
para maltratadores, y criminales.
Estas medidas, a pesar de que tienen mucho valor
no llegan a la base fundamental de:
"Nuestros problemas sociales"
La raíz del problema es una respuesta equivocada de
los seres humanos a la palabra y normas de Dios, porque
cuando la vida nos es fácil, tendemos a dar por sentada
la bondad de Dios, y nos olvidamos de Él.
En Ezequiel 16, vemos que Dios declaró que Sodoma
fue destruida porque sus ciudadanos respondieron a Su
bondad con orgullo, crueldad y toda clase de conductas
abominables en lugar de gratitud y obediencia.
Por tanto, cuando miremos los problemas del mundo
de hoy, en lugar de tanto pedir, y exigir, que nuestros
jefes de gobierno, y la acción cívica hagan el mundo
más seguro, podríamos participar orando así:
(Señor, deseo influir a los que me rodean con un
carácter semejante al de Cristo.
Ayúdame para ser más agradecida por tu bondad)


* * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * *

La sociedad mejora cuando cambian las
personas individualmente.



No hay comentarios:

Publicar un comentario